Fuente: eleconomista.es
Este artículo trata de una apuesta que hicieron al respecto hace casi diez años Buffett y Ted Seides, responsable de la firma Protege Partners.
Buffett colocó 320.000 dólares en un fondo indexado al S&P 500, mientras que Protege Partners colocó otros 320.000 dólares en determinados fondos de gestión activa, considerados por los expertos de dicha firma como los mejores. Dentro de la apuesta, las inversiones realizadas tenían que descontar de la rentabilidad las comisiones, que en el caso de la gestión activa suelen ser mucho más elevadas que en la gestión pasiva.
El dinero debía permanecer depositado en los fondos durante diez años, momento en el que se vería si, una vez descontadas las comisiones cobradas por los asesores, se han revalorizado más o menos que el índice S&P 500, que agrupa a las 500 mayores empresas de Estados Unidos. El ganador de la apuesta elegirá a qué organización caritativa iba a parar el dinero que se haya acumulado durante la década.
Más de nueve años después Seides ha anunciado su derrota. La rentabilidad anual compuesta del fondo índice del S&P ha sido del 7,1% anual, frente al 2,2% del fondo de fondos elegido por Seides. Uno de los motivos por los que Buffett ha salido ganador en esta apuesta se deriva de las elevadas comisiones de los fondos de gestión activa.
El fondo Vanguard S&P 500 Index Admiral Acciones Fondo (VFIAX), que eligió Buffett obtuvo una rentabilidad del 85,4% acumulado durante estos más de nueve años, mientras que la cesta de fondos seleccionado por Seides obtuvo un 22%. Buffett sin hacer nada, sólo indexando su inversión a un índice ha logrado superar a una cesta de los supuestos mejores fondos en los que trabajan grandes gestores, que dedican su tiempo a hacer movimientos para superar al mercado.
Una justificación insuficiente
Seides ha intentado justificar su derrota asegurando que elegir un fondo indexado al S&P 500 no es una elección ni tan pasiva como parece ni tan simple. Este gestor argumenta que en este índice se concentran las mayores acciones cotizadas de EEUU, por lo que es un índice en el que se está eligiendo de forma 'activa' una empresas concretas y que están localizadas en un país determinado como es EEUU. Por otro lado, Seides argumenta que el rendimiento de este índice desde 2008 "ha sido anormalmente fuerte durante este periodo".
Seides ha reconocido en Bloomberg que ha perdido la apuesta de forma clara; un fondo indexado al S&P 500 ha sido mucho más rentable en los últimos diez años que la selección de fondos gestionados de forma activa que escogió Seides, pero este gestor, en lugar de darse por vencido, ha pedido doblar la apuesta para los próximos diez años y asegura que está vez sí ganará a Buffett.